“Maestra”
Maestra, hoy es su cumpleaños, y para mi, es un gran dia. Lo recuerdo desde niño, cuando a su salon de clases, con hambre y ropa sucia, yo diariamente atendía. Quizás usted no se acuerde de mi. Soy aquel niño que siempre llegaba tarde, y con poca energía.
Siempre me acuerdo de usted, especialmente en este dia. Si, la recuerdo con frecuencia. Sin saberlo, usted impacto mi vida de una forma impresionante, en los primeros años después de mi infancia.
Le escribo estas letras para felicitarla hoy en su dia y para informarle de una buena noticia. Pero antes, hoy y siempre, le deseo lo mejor. Que su familia y todos sus alumnos, siempre le brinden alegría, paz y amor.
En mis primeros años de vida, usted me dio mucho mas que educación. Cuando yo tenia hambre, usted me alimento. Cuando de una herida me salía sangre, usted me curo. Si, de usted recibí mucho mas que educación. Me dio fuerza, protección, disciplina y motivación. Me duele decirlo, pero mis padres nunca me pusieron atención.
Con mis palabras, mi intención no es ponerla triste. Al contrario, espero se ponga a sonreír como en las ocaciones cuando de niño, yo le contaba un chiste. Nunca se lo confesé, pero siempre quise ser como usted. Por aprender mas y mejorar como persona, usted alimentó mi sed.
Maestra, hoy es su cumpleaños. Aunque ya no soy un niño, siempre la recuerdo con cariño. Deseo que hoy, en su dia, su ser este lleno de felicidad y alegría. Me despido con la buena noticia. Gracias a usted, en unos cuantos meses, de la universidad, recibiré mi segunda maestría.