“Mil Disculpas”
Por no hablarte e ignorarte, hoy te pido mil disculpas.
Me brindaste tu amistad, muy sincera y muy abierta. Mas no supe valorar, lo que tu dejaste en mi puerta.
Amistades buenas, son difícil de encontrar. Las razones por no hablarte, finalmente pude aceptar.
Tus consejos, sinceros y frescos, como padre y persona, me ayudaron a crecer, y por siempre eso te lo voy agradecer.
Trece meses han pasado, y contigo no he platicado. Espero no sea tarde, tu amistad recuperar, pues ahora yo entiendo, lo que no supe valorar.