“Pensando Otra Vez”
Hoy, nuevamente me recosté sobre la tierra. Me cobije con hojas secas, y mi almohada fue una piedra.
Si, hoy me recosté aquí, y en voz baja, dije, “pensando otra vez.” Saben, les cuento esto en mis escritos, con la esperanza de que recuerden cuando el cerro y la tierra, los llamaban a gritos.
Yo recuerdo esos momentos muy bien. Mientras me recostaba, mi mente pensaba. No en lo usual, pues a mi cuerpo, la tierra abrazaba. Para comunicarse, el lenguaje de la tierra es diferente. No se habla. No se escucha. Solo se siente.