“Llaveros Ajenos”
“Llaveros Ajenos”
Tu tienes la llave de tu futuro. No la cuelgues en llaveros ajenos.
Tu tienes la llave de tu futuro. No la cuelgues en llaveros ajenos.
Para alcanzar el éxito, la mente de un empresario trabaja a diario. Su hambre de aprender no se satisface con ningún alimento. No le teme al fracaso, pues él sabe que siempre se aprende algo en el intento.
Dios sembró semillas de éxito en tu corazón. Para cultivarlas, es necesario que descubras y alimentes tu pasión. No pierdas tu enfoque con cualquier distracción.
Asegúrate de regar las semillas en tu corazón. Si lo haces, el éxito en tu ser florecerá, y vivirás como si todo el año fuera primavera. Las semillas del éxito están en tu corazón. No las busques afuera.
Hay quien me acusa de ser el responsable por sus éxitos. La verdad es otra. Yo no le enseñe a cantar ni a bailar. Tampoco le enseñe a jugar el deporte que hoy domina. Le sugerí que sus metas escribiera y eso le ayudo a que sus talentos descubriera.
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