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“Lo Que Viví”

Para poder llegar aquí, de mi pueblo natal, hace muchos años salí. Para lograrlo, solo Dios y yo sabemos lo que viví. Buscando una vida mejor, y encomendados a Dios, como lo hice yo, muchos continuan buscando ‘El Sueño Americano.’ A mi no me toco, pero conozco a personas que sepultaron a un hermano en la tierra caliente de un llano.

Hoy, muchos dirían que me encuentro viviendo ‘El Sueño Americano.’ Tengo casa y dinero, pero por trabajar, desatendí lo primero. ¿Te has preguntado el precio que tiene ‘El Sueño Americano’? Yo perdí a mi familia, y ya no le hablo a mi hermano. Su cuerpo no se quedo sin vida en un llano. Él tiene salud, familia, y trabajo. Simplemente se pasa la vida ocupado, pues sigue buscando ‘El Sueño Americano.’

Si, para poder llegar aquí, solo Dios y yo sabemos lo que viví. Mis hijos ya están grandes, y de mi lado, mi esposa se ha marchado. En cuidarla y amarla, nunca puse cuidado. Antes de que se borre de mi memoria, a mis hijos quisiera poder contarles mi historia. Quizás no lo pueda lograr. A ellos no les gusta escuchar, y como soy hombre de pocas palabras, a mi no me gusta platicar.

Me gustaría contarles de los sacrificios que su madre tubo que hacer, para que en este país, ellos pudieran nacer. Hubieron muchos. Por buscar ‘El Sueño Americano,’ nunca me tome el tiempo para verlos crecer. La familia de mi hermano es pequeña, y apenas comienza a florecer. Quisiera darle un consejo. Antes de que sea tarde, quiero que se de cuenta de lo que él puede perder.

También esto no se si lo pueda lograr. En ocasiones me armo de valor, y le hablo por teléfono, pero él no tiene tiempo de contestar. En breves ocaciones, de él recibo un texto diciéndome que mis llamadas, él pronto va a regresar. ¿Para platicar con él, cuanto tiempo mas tendrá que pasar? ¿Será que de buscar ‘El Sueño Americano,’ el algún día se va a cansar?

Lo cierto es que para poder llegar aquí, solo Dios y yo sabemos lo que viví. Si no logro darle el consejo a mi hermano, y si tu también te encuentras buscando ‘El Sueño Americano,’ pues aquí te dejo el consejo. Espero le pongas atención al ser que te habla en el espejo. Para hacerlo, no esperes a que llegues a viejo.